La Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG), en colaboración con Massey University de Nueva Zelanda, ha realizado un descubrimiento fascinante: los cantos de los cucuves de Floreana han experimentado cambios notables debido al aislamiento de las poblaciones que habitan en los islotes Gardner y Champion.

Los investigadores compararon grabaciones de cantos de hace 60 años con registros actuales, revelando que la complejidad de los cantos ha variado con el tiempo. Esta evolución podría tener implicaciones significativas en la comunicación y reproducción de estas pequeñas poblaciones, que están separadas por una distancia de 16 kilómetros, mucho mayor que su capacidad de vuelo.

Hace dos siglos, la introducción de especies invasoras llevó a la extinción de los cucuves en Floreana, dejando solo dos poblaciones remanentes: entre 50 y 80 cucuves en Champion, y entre 250 y 400 en Gardner. Esta separación ha dado lugar a diferencias en sus cantos, lo que podría impactar su capacidad reproductiva y, en consecuencia, su supervivencia a largo plazo.

En respuesta a estos desafíos, el Proyecto de Restauración Ecológica de Floreana se ha propuesto una ambiciosa meta: reintroducir los cucuves en la isla principal para mejorar la conectividad entre las poblaciones aisladas y asegurar la preservación de esta especie emblemática. ( conozca más del Proyecto Floreana en: https://floreanavuelveaflorecer.ec/ )

Este estudio es un ejemplo del compromiso de la DPNG con la protección de la fauna endémica de Galápagos, en concordancia con los lineamientos del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE). La colaboración internacional, es fundamental para avanzar en la investigación y en la implementación de soluciones efectivas para la conservación.

Cada iniciativa que emprendemos en las islas refuerza el compromiso de Ecuador con la sostenibilidad y la protección del medio ambiente. Este estudio no solo destaca la importancia de la ciencia en la conservación, sino que también marca un hito en los esfuerzos por preservar la biodiversidad de la isla Floreana.