Centros de crianza, una herramienta de conservación
Desde la década de los 60, los centros de crianza se han convertido en eficientes herramientas de manejo, que han ayudado a recuperar las especies de tortugas gigantes del archipiélago. En Santa Cruz, el Centro de Reproducción y Crianza en Cautiverio de Tortugas Gigantes “Fausto Llerena”, alberga 1.444 ejemplares entre neonatos y juveniles, que serán devueltos a su hábitat natural cuando estén listos; pero además 68 adultos reproductores.
Los centros de crianza son espacios en los que las tortugas viven en condiciones similares a las que encontrarán al retornar a su ecosistema original, por ello, una parte fundamental del cuidado de los quelonios es su alimentación. Las tortugas son nutridas con otoy y porotillo, asegurando una dieta balanceada para su desarrollo. En Santa Cruz, se reproducen las especies Chelonoidis niger de Floreana; C. darwini de Santiago; C. hoodensis de Española y las propias de la isla C. porteri y C. donfaustoi.