Los guardaparques de la Dirección del Parque Nacional Galápagos, en coordinación con las demás autoridades competentes, realiza inspecciones a las embarcaciones que ingresan por primera vez a Galápagos, a fin de que éstas cumplan con los cuidados ambientales necesarios que deben considerar mientras permanezcan dentro de la Reserva Marina de Galápagos.

La inspección consiste en revisar que las naves cumplan con los estándares ambientales establecidos por la Dirección del Parque Nacional Galápagos, en su Resolución 028, como contar con planta de tratamiento de aguas, certificado de fumigación actualizado, material de contingencia disponible para alguna eventualidad, correcta disposición de desechos, entre otras, lo que minimiza cualquier impacto que estas actividades puedan generar sobre el área protegida.